Domingo Alberto Rangel M.
Constituyente coyuntural para saciar a los politiqueros... |
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Parodiando la manida frase puedo
afirmar que un fantasma recorre Venezuela. Se trata sin embargo de un
espectro que no asusta a nadie porque no es el comunismo sino Pablo Medina quien trasiega los caminos promoviendo
de nuevo una Constituyente. Bien, comienzo entonces recordando
que si la memoria no me falla Pablo Medina fue uno de los constituyentes que de la mano de Hugo Chávez contribuyó
a redactar la actual Constitución hace pocos años. También recuerdo que Pablo opinó a finales de 1999 que
Hago estas acotaciones porque
no tengo registros de que el ciudadano Pablo Medina se haya retractado de su fe de estatista y socialista, de toda
una vida, como para que venga ahora a reclamarle ignoro que cosa a ¿Entonces, ¿que será
lo que quiere Pablo? para decirlo con letra de merengue? Obviamente nada de lo que afirma
porque me parece que esconde sus intereses. Lo que quisiera Pablo es una
curul que perdió por falta de votos el año pasado. Es eso. Y en vez de buscar los votantes perdidos Pablo pide una Constituyente a ver si le pega el palo a la piñata. A Pablo esto de pegarle palos
a las piñatas puede ser que le parezca lógico, pero yo, desde la óptica del ciudadano común, debo rechazar
semejante irresponsabilidad. Quien por el contrario pareciera que no la rechaza es el candidato Rosales, quien quizás tratando de impedir que
Pablo Medina le mine sus bases anuncia, a su manera, una Constituyente cuando dice que de ganar, cobrar etc. cambiará Esta singular manera de ofrecer
constituyentes merece análisis aparte porque uno debe entender que Manuel Rosales dejó a un lado los arrebatos golpistas que
dejó ver cuando apoyó con su firma el cambio de diputados, magistrados del TSJ, rectores del CNE etcétera que el inefable
Pedro Carmona intentó el 2002. Por ello es de entender que
cuando Rosales en su peculiar manera de decir las cosas, habla elegir diputados y senadores en el 2007, en realidad
piensa en convocar una Constituyente, en caso de ganar, cobrar etcétera y antes que Pablo Medina –o Chávez-
se la convoque. Y allí también cabe mi protesta
contra semejante despropósito: Una Constituyente coyuntural, para complacer políticos que por necios o por carecer
de votos perdieron sus curules no vale la pena para nadie, salvo para los ociosos que añoran la curul perdida y creen
que la pueden recobrar acompañando a Medina o Rosales. El mismo razonamiento cabe contra
las bravatas del Presidente a quien le dio por amenazar con modificar ¿Acaso Hugo Chávez, Pablo Medina y Manuel Rosales no se dan cuenta
que el socialismo no produce riqueza porque está diseñado para repartir y que Venezuela con un pírrico PIB per cápita que
no llega a seis mil dólares al año... no es ni puede ser un país rico? Y si se dan cuenta ¿entonces
para promueven Constituyentes y senados, como propone Rosales sin darse cuenta que ni siquiera el Zulia estaba conforme cuando
el legislativo era bicameral y la cámara “alta” estaba llena de compañeritos del gobernador y
candidato? La
Constitución merece reformarse pero no por vía de complacer los apetitos de la fauna política sino por medio de Estatutos
regionales para que sean los capitalinos, zulianos, centrales, andinos, llaneros, guayaneses, insulares y orientales quienes
decidan si sus regiones tienen derecho a protegerse y resolver sus propios problemas y a enriquecerse libremente sin las trabas
que una Constitución estatista, hecha al gusto de Hugo, Pablo y Manuel, ha creado para solaz de los corruptos que le impiden
el trabajo a los venezolanos desde los ministerios, gobernaciones y alcaldías. Ese es el debate
serio y útil que se debe dar en Venezuela después que pasen unas elecciones donde francamente no hay de dónde
escoger. EL
STRIP TEASE DEL MINISTRO El
ministro Rafael Ramírez habría sido objeto de censura o destituido del cargo a raíz del ya célebre discurso ante sus conmilitones
de PDVSA, al menos así habría sido en un país donde la prédica del ejemplo equivocado no lleve tantos años insinuando que
“jefe es jefe aunque tenga cochochos”. No
lo botarían del empleo por el strip tease verbal donde dejó a la vista su mezquindad y la madera de abusador
sino por violar las leyes. Para
bochorno nuestro eso no va a ocurrir como tampoco botaron de sus puestos a los jefes petroleros a comienzos del 2002
cuando utilizaron la empresa como punta de lanza de una conspiración golpista que alcanzó el cenit cuando el paro que le costó
a la Nación cerca de veinte mil millones de dólares. Habrá
quien diga cinicamente que “un clavo saca a otro clavo”, respuesta igual de cínica que las pataletas
de quienes ahora están fuera de PDVSA, pero que cuando laboraban allí se atrevieron a usar las instalaciones y equipos de
una empresa pública para desestabilizar un gobierno democrático al tiempo que hacían grandes negocios personales al margen
de la legalidad como también se hacen ahora porque los “rojos, rojitos” en eso se parecen a los meritócratas. Evidentemente
la solución a una situación que nos perjudica como pueblo no está en protestar como si estuviéramos en Suiza porque como digo
no es la primera vez que se usa a PDVSA como arma de la política y tampoco han sido Juan Fernández y Rafael Ramírez los únicos
abusadores del poder petrolero. Hay
sin embargo un punto que deberían tomar en cuenta los moralistas antes salir a dar declaraciones en los medios y es que aparentemente
el video fue recibido por el país con la misma naturalidad con que hace cuatro años vimos a los empleados mejor pagados del
país anunciar un paro porque les daba la gana. Me
refiero a la obligación de buscar correctivos morales y reales que debe tener toda persona que reaccione y se sienta indignada
por el mezquino e ilegal discurso donde Rafael Ramírez más bien en tono explicativo, como si estuviese a punto de perder el
puesto, le anunciaba a sus correligionarios más radicales que PDVSA “es roja, rojita” y que los
puestos son “del Presidente”. Y
hago énfasis en este punto porque correctivos no ofrecen ni el actual gobierno ni tampoco el retador Manuel Rosales que prefiere
dejar a PDVSA en manos de los políticos. Correctivos
estamos ofreciendo quienes desde la derecha liberal hamos propuesto la privatización popular de la industria petrolera. Solo
entregándole a todos los venezolanos una cuota parte de acciones se podrá evitar que abusadores se escuden
en la ideología del estatismo para cometer desmanes, al tiempo que dándole acciones a todos los venezolanos dotamos de piso
a un capitalismo de corte popular. Por
eso no caigo en una trampa que a mi modesto juicio fue tendida por los estrategas del gobierno que buscan aumentar la abstención
–que será la gran ganadora de diciembre- con la divulgación de un video que revela una situación que no se va a corregir
con Chávez o Rosales en la Presidencia. Otro
punto: Mario Silva, el gigantón de La Hojilla amenaza a quien grabó al ministro en su abusivo discurso. Pregunta: ¿está
loco ese señor? ¿de quien es la falta, del ministro abusador o de quien lo grabó? ¡Ni
en “el mundo al revés”. |
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